A finales del 2009 (en el mes de octubre) escribía en este blog la triste noticia de la muerte de Mercedes Sosa, la perdida de una voz única y excepcional...
En este mes el mundo ha perdido otra gran voz, otro gran talento, otra gran persona.
En las noticias no se ha podido hacer otra cosa más que buscar una explicación de su muerte, más que especular sobre los culpables, más que pedir justicia a su muerte; y ¿que más se podría hacer? ante la muerte de una persona tan apreciada, ante la muerte de un ser querido, uno se queda sin armas, sin plan, sin estrategia para remediar lo que no tiene remedio.
Aunque hace mucho tiempo deje de escuchar trova y mis oídos desde entonces se han llenado de diversos sonidos y voces (muchos de ellos, lo reconozco, carecen de genialidad) alguna vez me gusto la trova, alguna vez fue el genero que llenaba mis oídos. Recuerdo perfectamente que siendo niña escuche la famosa canción "No soy de aquí ni soy de allá" y conforme fui creciendo esta canción siguió llegando a mi en diferentes circunstancias, en diferentes lugares, a veces buscándola y a veces de manera inesperada y además debo decirlo siempre le encontraba diferentes significados. Siempre esta canción me recordará la persona que vivía en mi cuando gustaba de la trova, cuando gustaba de la reflexión en una canción, cuando escuchaba su canción y al escucharla crecían en mi ilusiones de una adolescente.
La voz de Facundo Cabral ya no llenara más los escenarios y en definitiva dejara de ser la voz incomoda que fue alguna vez para algunos políticos, sin embargo siempre resta recordar su voz, su voz y su vida, su forma de vivir y de luchar, resta dar honor a quien honor merece!
